Es bien sabido que los vehículos eléctricos son una excelente alternativa como medio de transporte sostenible, así como una excelente razón de uso y una oportunidad para mejorar la eficiencia energética en términos globales, sobretodo en el equilibrio del sistema eléctrico.
La recarga de las baterías de estos vehículos puede hacerse cuando escoja el propio usuario, disponiendo de una cierta flexibilidad para gestionar el tiempo necesario a diferencia del resto de los consumos eléctricos cotidianos.
El hecho de tener un mayor control y una mejor gestión sobre la demanda implica una serie de ventajas, ofreciendo al sistema eléctrico la posibilidad de mejorar su eficiencia global facilitando el aumento del uso de las energías limpias dentro del sistema, pasando a ser cada vez un mayor porcentaje del total consumido.
Vemos por ejemplo que si recargamos las baterías del coche eléctrico o de la moto eléctrica durante la noche, hará que aumente el consumo durante estas horas. Además de contar con un precio más bajo de la electricidad durante las horas de menor demanda, con lo que el coste del transporte también se ve reducido.
¿Qué papel juegan los vehículos ecológicos en el sistema actual de energía?
Los vehículos de movilidad sostenible tienen un papel de gran importancia al ayudar a integrar las energías renovables en el sistema eléctrico actual en referencia a las condiciones de seguridad y protección. Recargar los vehículos eléctricos durante las horas nocturnas, aumentando la demanda en dichas horas, contribuye a reducir las posibles instrucciones de minimización a los parques eólicos por inviabilidad de los balances de potencia.
“Los vehículos eléctricos son nuevos consumidores para el sistema y en los próximos años pueden llegar a representar hasta el 3% de la demanda actual de electricidad.”
Los estudios sobre el transporte español afirman que siempre que se haga de manera controlada y durante los tiempos óptimos establecidos, es posible integrar un gran número de este tipo de vehículos en el sistema eléctrico sin inversiones adicionales en generación y red de transporte. De lo contrario, si la mayoría de recargas se llevaran a cabo durante las horas punta de consumo, podría hacer que la demanda aumentará significativamente en el sistema, con lo que sería necesario expandir el conjunto del sistema tanto de generación como de transporte.
De aquí radica la gran importancia de promover mecanismos de gestión de la demanda que fomenten la recarga preferentemente en estas horas nocturnas. Para un mayor y detallado control se precisará de la ayuda de contadores inteligentes que permitirán el desarrollo de estas opciones en el futuro.
Vemos por lo tanto que la evolución de los vehículos de motor eléctrico va a ir ligada al desarrollo de las energías renovables y su capacidad de producción de electricidad en el lugar demandado.
En resumen, una combinación correctamente ejercida entre energía eólica para los picos nocturnos de demanda y energía fotovoltaica sobre tejado para la demanda local diurna, es un factor clave directamente relacionado con el desarrollo del coche eléctrico de manera ecológica e inteligente.
Todos sabemos que la principal esperanza y finalidad de estos vehículos eléctricos se basa en la posibilidad de alimentarse de energías renovables sin necesidad de utilizar la aportación de otras fuentes convencionales.