Sea por concienciación, por comodidad o por simple moda, lo cierto es que las bicicletas eléctricas plegables son todo un éxito hoy día. Las vemos en el campo, en la ciudad. Las usan y disfrutan pequeños y mayores, pues sirven tanto para desplazarse como para hacer ejercicio, liberar tensiones y divertirse.
En cualquier caso, y para que esta nueva moda se popularice aún más, queremos hablaros de las increíbles ventajas de las bicicletas eléctricas plegables, de manera os animéis a probar estos vehículos eléctricos ecológicos de dos ruedas.
¿Qué utilidad tienen las bicis eléctricas plegables?
Con la bicicleta eléctrica plegable te puedes beneficiar de lo siguiente:
Ahorras espacio
Es una ventaja más que evidente. Una bicicleta plegable ocupa mucho menos que una que no lo es.
No tienes que dejarla en la calle
Este ahorro de espacio te permite dejarla cómodamente detrás de una puerta o incluso debajo de la mesa o de tu escritorio. Así la tienes siempre a la vista y lejos de manos ligeras, despreocupándote por completo.
Ahorras dinero
Lo bueno de las bicis eléctricas es que puedes regular su motor para llevarla prácticamente como si fuese un ciclomotor. Eso sí, ahorrándote el gasto del seguro, impuestos de circulación, revisiones y puestas a punto, pago en las zonas que así lo requieran y un largo etcétera.
Te desplazas con total libertad
Una bicicleta es más estrecha incluso que una moto. Puedes evitar atascos, no es tan rápida como un coche, pero sí te puedes desplazar a muy buena velocidad, por lo que inviertes poco tiempo en tus trayectos, llegas a sitios donde otros vehículos no tienen permitido el acceso o la circulación, no tienes que preocuparte de buscar un aparcamiento, que en prácticamente todas las ocasiones queda lejos del lugar donde pretendes ir, por lo que te desplazas justo hasta donde quieres, sin tener que invertir tiempo para llegar desde tu vehículo hasta el sitio en cuestión.
Te complementa en tus trayectos con otros vehículos
Al plegarse es tan cómoda de llevar que puedes utilizar el transporte público y, una vez en la parada más cercana a tu destino, sacar tu bici eléctrica plegable y llegar hasta donde necesites.
Lo mismo ocurre si te apetece, por ejemplo, hacer una salida al campo. Puedes aparcar tu coche y adentrarte en el bosque o subir una montaña sólo con la bici.
Por supuesto, también es útil para estacionar tu vehículo en zonas sin tráfico y con espacio suficiente para aparcar y completar el trayecto hasta tu destino en tiempo récord.
Te pone en forma, o no
Si te apetece hacer un poco de ejercicio, apagas el motor y a hacer pierna. Que necesitas llegar a algún sitio sin sudar ni una gota, lo regulas para no tener que realizar esfuerzo alguno; tú estás a mando.
Respetas el medio ambiente
Por supuesto, la principal característica de estas bicicletas plegables de motor eléctrico, lo que define a cualquier vehículo eléctrico, es que es respetuoso con el medio ambiente. No utiliza combustibles fósiles, se vale de unas horas de electricidad para estar a punto y con ello puede llevarte donde necesites.
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